Organizadas por la Cátedra Maimónides del Consejo Andaluz de Colegios Médicos con la colaboración de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Andalucía Oriental, Ceuta y Melilla y la Escuela Andaluza de Salud Pública, los días 22,23 y 24 de noviembre, se celebraron las Jornadas de Formación Continuada en Profesionalismo Médico “Desde la Deontología y la Ética en busca de la excelencia” en Memoria, como homenaje de sus discípulos, del Profesor D. Enrique Villanueva Cañadas.
Las palabras del Presidente de RAMAO, Prof. Armando Zuluaga Gómez, pronunciadas en la clausura de las mismas, que aparecen a continuación, resumen el desarrollo del programa, la personalidad, las cualidades, la profesionalidad, el magisterio y las aportaciones del Prof. Villanueva a la Medicina Legal y Forense a nivel nacional e Internacional.
“El Consejo Andaluz de Colegios Médicos, organizador de estas Jornadas y en su nombre el Presidente del mismo, el Ilmo. Sr. D. Antonio Aguado Núñez Cornejo, junto con el comité encargado de los actos, el Ilmo. Sr. D. Ángel Hernández Gil, Director Académico de la Cátedra Maimónides, la Excma. Sra. Dª María Castellano Arroyo y el Ilmo. Sr. D. Joaquín Fernández-Crehuet Navajas, han querido distinguir a nuestra Real Academia como sede de los actos. Por todo ello nuestro reconocimiento y agradecimiento por tan honorable distinción.
Por un lado, se ha honrado la memoria del Prof. D. Enrique Villanueva Cañadas por parte de sus discípulos con el lema “Al Maestro que, con su obra y vida, regaló un legado para la Historia”, un reconocimiento al maestro, que les honra, dignifica y enaltece. Por otro lado, se ha puesto en valor la “Deontología y la Ética en busca de la Excelencia” gracias a las magníficas conferencias y aportaciones que los distintos y distinguidos ponentes nos brindaron en sus exposiciones.
En la primera jornada se abordaron los Dilemas éticos y deontológicos a resolver en la pandemia por COVID-19, en donde se trataron los aspectos de los Certificados médicos, en especial los referidos a la defunción. El secreto y confidencialidad en el ejercicio de la profesión. La importancia de la Geriatría y la Gerontología en la atención en Residencias de Mayores. La lealtad compartida, y los Conflictos jurídicos en la limitación de los derechos fundamentales durante la Pandemia COVID-19.
En la segunda jornada, tan interesante como la primera, se trataron los Principales desafíos frente a la Nueva Ley de Eutanasia, considerándose Inoportuna, Innecesaria y Perturbadora, contraria a la Deontología Médica, y dejando claro que la ética está por encima del derecho. Además, se valora la Capacidad de decisión del paciente, la Valoración del sufrimiento, pero como expresó la Dra. María Castellano “para eliminar el sufrimiento no es necesario eliminar al que sufre”, destacando además el derecho a la negativa del médico en contra del sometimiento (derecho a la Objeción de Conciencia). Por último, en esta jornada se abordó la intención de los presentes en redactar un documento a favor del amplio desarrollo, en nuestra comunidad autónoma, de la especialidad de Cuidados Paliativos.
Llegamos al día de hoy, al punto y final de las Jornadas. En ella sus discípulos, primero, se han encargado de hacer un amplio recorrido por la ingente Vida y Obra de su Maestro, resaltando el lugar que ocupó como figura histórica en la Medicina Legal y Forense.
A continuación, se han tratado temas relacionados con las enseñanzas que impartió el Prof. Villanueva, y de la que ellos han sido garantes de su difusión en los foros académicos y universitarios.
Por un lado, nos sentimos orgullosos de nuestro ilustre académico y expresidente de esta Institución, D. Enrique Villanueva Cañadas, que tanto hizo por ella y la enalteció, gracias a su muy bien ganado prestigio profesional.
Por otro lado, el Prof. Villanueva, hizo de la defensa de la vida, de la lex artis médica, de la relación médico-enfermo, de la deontología, la ética y el profesionalismo médico, su bandera. Como dije en el acto inaugural, definía el Profesionalismo médico como “el conjunto de habilidades, conocimientos, principios y valores que sustentan una práctica idónea de la Medicina, en el marco de los más elevados estándares de calidad científica y humana”. Decía W. Churchill: “el problema de nuestra época consiste en que los hombres no quieren ser útiles, si no importantes”. Puedo decir que el Prof. Villanueva fue primero útil y después importante.
Útil porque dedicó su vida al servicio del paciente y a resaltar los valores de la profesión médica.
Importante, porque su Obra (ya comentada por su gran conocedora y discípula Profa. María Castellano), consiguió la excelencia, practicó el humanismo, la generosidad, la responsabilidad y el altruismo, lo que debe caracterizar a nuestra profesión.
Fue un Maestro, no un enseñante, porque aparte de enseñar su Magisterio, creó un pensamiento, una forma de ser, y trazó el camino, siendo la brújula o señal que entendieron y siguieron sus discípulos. Creo Escuela, algo que solo lo consiguen los grandes Maestros.
No fui su discípulo, pero sí uno de sus buenos amigos. Su gran sabiduría, sus consejos y sus enseñanzas en las largas tertulias que mantuvimos, quedan en mi recuerdo, como marca indeleble del aprecio y cariño que siempre le profesé
Querido Maestro siempre estarás en nuestro recuerdo, y esta, tú Real Academia nunca te olvidará.
Una reflexión: La medicina en su conjunto es ciencia y es arte, pero ¿es la medicina que hoy vivimos ciencia y arte?
La misma mente humana se ha encargado de diseñar máquinas (Robots), pero esto no es nuevo. El mismos Leonardo Da Vinci en el renacimiento, diseñó el primer Robot humano (por eso los robots quirúrgicos actuales llevan el nombre de su inventor).
También, la mente humana, se ha ocupado de incorporar algoritmos diagnósticos y terapéuticos, diseñar un modelo de inteligencia artificial, a la que estamos abocados a dejar en sus “manos” los diagnósticos de tal o cual enfermedad. La tecnología avanza al ritmo de un rayo y van por delante de las leyes.
El médico ya casi ni mira, ni palpa, y puede llegar incluso a dejar de razonar, pues las máquinas se encargarán de la atención del paciente, la inteligencia artificial del diagnóstico y tratamiento, es decir llegamos a la deshumanización total de la medicina.
Y me pregunto: ante una demanda (a las cuales ya nos hemos acostumbrado), ¿será el médico el demandado o serán por el contrario los nuevos sistemas diseñados por nuestra propia inteligencia las demandadas?
He aquí la cuestión. ¿Tendrán que cambiar las leyes del derecho sanitario?, ¿cambiarán nuestros códigos de ética y deontológico?, ¿cambiará el concepto de profesionalismo médico?
Un ejemplo: en un desastre aéreo, siempre estamos esperando los resultados de la caja negra, para saber si el culpable ha sido un fallo humano o la máquina,
Miremos con optimismo el presente y el futuro incierto que nos espera, recuperemos gran parte del humanismo, y conservemos en nuestra mente la gran declaración de Ginebra del año 2017, que fue considerada por la Asociación Médica Mundial, como el reemplazo del Juramento Hipocrático, aunque conservando sus principios.
No me queda más que agradecer a ponentes, asistentes y a todas las personas, que de una u otra forma han colaborado en el éxito de las Jornadas.
Quiero dar un abrazo muy cariñoso, en nombre de toda la comunidad académica y universitaria, a toda la familia de nuestro gran maestro”