Las siete Academias de Granada han sido las últimas corporaciones en brindar su apoyo al proyecto de Capitalidad Cultural con la firma, esta mañana, del manifiesto de adhesión al proyecto ‘Granada Capital Europea de la Cultura 2031’, que impulsa el Ayuntamiento. Así lo ha informado la alcaldesa, Marifrán Carazo, quien ha agradecido este refrendo y ha reiterado su llamamiento a “sumarse a este protocolo abierto e ilusionante para nuestra Candidatura”.
La regidora, quien ha destacado “la perfecta colaboración” entre la ciudad y las siete Academias firmantes del Manifiesto “como muestra de la importancia que tiene su labor científica y divulgativa en la difusión de Granada como Capital Europea de la Cultura para el 2031”,
Además de por la alcaldesa, Marifrán Carazo, el Manifiesto ha sido firmado por José Antonio López Nevot, presidente de la Academia de Buenas Letras de Granada; Francisco González Lodeiro, presidente de la Academia de Ciencias Matemáticas, Fisico-Químicas y Naturales de Granada; Agustín García Asuero, presidente de la Academia Iberoamericana de Farmacia; Orfilia Saiz Vega, directora de la Real Academia de Bellas Artes Nuestra Señora de las Angustias; Antonio J. Villatoro Jiménez, presidente de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Andalucía Oriental; Rafael López Cantal, presidente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de Granada, y Armando Zuluaga Gómez, presidente de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Andalucía Oriental.
Tras incidir en “la rica historia y en la vibrante escena cultura y científica que Granada exhibe en la actualidad”, la alcaldesa se ha mostrado convencida de que la ciudad de la Alhambra ofrece “todos los atractivos y requisitos exigibles” para ser la futura Capital Europea de la Cultura 2031. “Somos una ciudad que valora sus tradiciones artísticas y culturales, pero también impulsa nuevas formas de expresión y tecnologías, fomentando la creación artística mediante el apoyo a artistas locales e internacionales y la organización de innumerables festivales, exposiciones y eventos culturales”, ha señalado.
“Granada es una ciudad orgullosa de su herencia pero que tiene la mirada puesta en el futuro y en la firme apuesta de ser Capital Europea de la Cultura en el año 2031 contando para ello con todos los profesionales del arte y la cultura, los ciudadanos, instituciones y visitantes que, con la firma de este manifiesto, nos comprometemos a construir un futuro más brillante, en paz y culturalmente enriquecido para todos”, ha añadido.
Así, el Manifiesto define Granada como una ciudad de futuro que ha sido y sigue siendo un cruce de culturas y civilizaciones, que valora el diálogo intercultural y la cooperación internacional “y que se propone seguir fomentando el intercambio cultural, creativo, científico y de investigación con otras ciudades europeas y del mundo, aprendiendo y compartiendo experiencias y conocimientos. Granada promueve la diversidad cultural como una fuente de riqueza y entendimiento mutuo y apoya iniciativas y proyectos para la integración, la paz y la comprensión global”.
El texto, que recoge la importancia del sector cultural como motor de desarrollo e innovación en el ámbito económico a través de actividades como la educación, el arte, el desarrollo personal, la ciencia, el turismo o el ocio, establece que el proyecto de Granada “es plenamente respetuoso con los valores y objetivos de las Capitales Europeas de la Cultura por lo que deseamos expresar públicamente nuestro deseo compartido con la ciudad de promover la cultura como motor de creatividad, así como la inclusión social, la sostenibilidad y el diálogo intercultural en los planos local, nacional e internacional”.
Con este fin, los firmantes del documento de adhesión se comprometen a reconocer el valor intrínseco de las artes y de la cultura, así como su potencial estratégico para la sociedad, promover prácticas culturales sostenibles y respetuosas con el medioambiente, un turismo respetuoso con la calidad de vida de los ciudadanos y la igualdad de oportunidades para el disfrute y la participación en actividades culturales por parte de la ciudadanía.
Del mismo modo, acuerdan estimular la creación artística y fomentar la innovación y el emprendimiento en los sectores cultural y creativo, contribuir al reconocimiento profesional del sector, apoyar programas educativos que acerquen la cultura a todos los grupos sociales, eliminar barreras físicas y sociales para asegurar que todos, sin excepción, puedan disfrutar de la cultura y favorecer políticas que posibiliten “una adecuada financiación a la programación cultural y una retribución justa y digna a los profesionales, como herramienta de creación de empleo vinculada a la cultura”.
Un desarrollo urbano sostenible, más infraestructuras culturales, el uso responsable de los recursos, la mejora de la calidad urbana con espacios que integren el arte y la naturaleza, un turismo sostenible o la apuesta por la creatividad, la inclusión, la sostenibilidad y la cooperación intercultural, son otras de las propuestas recogidas en el Manifiesto.